Real Madrid visitó al Valencia en Mestalla, un partido lleno de polémicas arbitrales y una afición que presionó mucho al equipo visitante.
En un emocionante encuentro en Mestalla, el Real Madrid y el Valencia protagonizaron un empate 2-2 en la 27ª jornada de la Liga, donde Vinicius brilló con un doblete que rescató a los blancos. El partido estuvo lleno de acción, con momentos de calidad, lesiones y controversia.
El Valencia tomó la delantera con un gol de Hugo Duro, quien aprovechó un centro de Fran Pérez para marcar de cabeza. Pocos minutos después, Yaremchuk amplió la ventaja tras un error de Dani Carvajal en la entrega hacia el arquero Lunin.
Antes del descanso, Vinicius redujo la brecha con un oportuno remate dentro del área chica. Su gol llevaba un mensaje claro: «NO AL RACISMO», acompañado por el gesto de levantar el puño en señal de protesta.
En la segunda mitad, Vinicius igualó el marcador con otro cabezazo, esta vez tras un centro de Brahim. Sin embargo, su celebración fue diferente, mostrando un gesto de «No los escucho», aparentemente en respuesta a los insultos recibidos en el pasado.
El final del partido estuvo marcado por la controversia cuando Bellingham anotó de cabeza el supuesto gol de la victoria para el Valencia, solo para que el árbitro lo invalidara por considerarlo fuera de tiempo. La decisión desató la furia del jugador inglés, quien recibió una tarjeta roja por protestar airadamente ante Gil Manzano.
El desenlace dejó un sabor agridulce en ambos equipos y desató nuevas discusiones sobre la actuación arbitral en el fútbol.
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